Cascada ArcoÍris

 Si algún nombre está bien puesto ese es el de la cascada Arcoíris, ubicada en la provincia de El Oro, a 14 kilómetros de la cabecera cantonal de Portovelo.

Por las tardes, aquí nace ese fenómeno óptico que muestra los siete colores básicos, que cautiva a todos y que se observa en el horizonte desde largas distancias.

En este caso, sin embargo, lo correcto es decir que el sitio está lleno de pequeños arcoíris que se forman por las entradas de luz que golpean contra el rocío que causa la caída del agua.

Se trata de un monumento natural con vida propia porque advierte si el invierno será lluvioso o el verano seco; si es prudente adentrarse en el río o mantenerse en la orilla; y además sana porque sus aguas tienen poderes curativos y anti estrés. Este apacible espacio de recreación familiar incluso guarda secretos como el del túnel, tras la caída de agua.



Comentarios